La partida (de rol)

Ciudades y habitantes

 

Draemia o costa draemia es el término que los orunitas utilizan desde el siglo I para referirse a las regiones costeras de Delu-Draem. En el gran norte, el término normalmente se usa para hablar de los piratas y los comerciantes de esclavos que pueblan esas costas y basan en estas actividades su economía y que suponen una amenaza constante para las embarcaciones comerciales e incluso para las ciudades costeras de sus naciones.

 

Aunque fue unificado durante breves espacios de tiempo por el Imperio, el territorio prácticamente nunca tuvo un gobierno unificado. Antes del siglo III, estaba dividido entre Ifriqiya y Tlemcen o Tiaret. Los orunitas consideraban que su «capital» era Ariad, en lo que es ahora Puerto Libre, aunque Relkor era la ciudad draemia más importante de la época. 

 

Desde el siglo V en adelante, se encontró dividida entre varias regiones. La República de Salé (con capital en Puerto Libre), por ejemplo, está gobernada por piratas draemios, que aprovechando los conocimientos de las costas norteñas, asolaron sus ciudades durante buena parte del siglo VI, y en menor medida, siguen haciéndolo. 

 

Entre los gobernantes más célebres de estos territorios están el pachá o bey de Esmenaeli, el bey de Guerena, el bey de Tiro, el bey de Calenfir y el bey de Dearmon, todos ellos tributarios del gran sultán del reino de Delu-Draem (que reside en Relkor) pero con gran autonomía de gobierno. Daenfis es también tributario del sultán, pero es un sultanato en sí mismo, aunque sometido al gran sultán.

 

Los corsarios draemios

 

La piratería draemia se conoce desde el siglo I. Desde muy antiguo —como atestigua la campaña llevada a cabo por Orun I contra los piratas— y organizadamente, el Océano Occidental conoció numerosas incursiones de piratas y corsarios que atacaban las naves y costas del gran norte.

No fue sino hasta finales del siglo V que los corsarios draemios se convertirían en la verdadera amenaza para la población y navíos del norte. Exiliados y piratas de Delu-Draem se sumaron a la piratería, pero sería con la expansión del sultanato, un reino draemio más o menos unido, y la llegada del corsario y almirante Kemal Reis en el año 487 que los corsarios draemios empezaron a convertirse poco a poco en una amenaza lo suficientemente importante como para convocar un siglo después una coalición de varios estados liderados por el Consejo de Navegantes, creado para afrontar este problema, y atacar la flota draemia (algo que finalmente ocurrió en el año 591), evento conocido como la cruzada draemia.

 

Los draemios cuentan con importantes puertos y bien defendidos, desde los que atacan cualquier punto del sur del continente y pueden refugiarse con rapidez llevando los rehenes por los que se piden rescate.

 

Esclavitud en los Estados draemios

 

Si bien los corsarios se dedican a saquear la carga de los buques que capturan, su objetivo principal es capturar y esclavizar a gente del norte ya sea en tierra como en el mar. Por lo general, los esclavos son vendidos u obligados a trabajar o prostituirse en las ciudades del norte de Delu-draem.

 

Monjes de la Orden de la Rosa recogen habitualmente dinero para poder liberar a los esclavos.

 

La captura es sólo la primera parte del viaje de pesadilla de un esclavo. Muchos mueren en los barcos durante el largo viaje de regreso al norte de Delu debido a enfermedades, falta de comida y agua. Los que sobreviven son exhibidos cuando caminan hacia la ciudad en su ruta a la subasta de esclavos. Luego tienen que estar de pie desde las ocho de la mañana hasta las dos de la tarde, mientras que los compradores pasan y los observan. Posteriormente sigue la subasta, donde los ciudadanos van a pujar por los esclavos que quieren comprar y una vez termina, el gobernador (Dey) puede comprar cualquier esclavo que quiera por el precio que se subastó. Durante las subastas éstos son obligados a correr y saltar para mostrar su fuerza y resistencia. Después de la compra, estos esclavos tienen dos opciones, ser rescatados a cambio de dinero u obligados a trabajar, prostituirse u otras actividades. Los esclavos son utilizados para una amplia variedad de trabajos, desde el trabajo manual duro para las tareas del hogar, esclavas sexuales en el Harén u otras. Por la noche, los esclavos son llevados a cárceles denominadas bagnios, que son por lo general calurosas y están abarrotadas.

 

Idiomas y cultos

 

Debe tenerse en cuenta que en todo Delu-Draem la fe en Logios es mayoritaria y por ende la piratería a naves es considerada por los draemios una forma de Guerra Santa y, por tanto, noble y ejemplarizante.

 

El idioma único que vertebra la región como una unidad cultural y política es el draemio, pudiendo haber dialectos o variantes locales.