La partida (de rol)
(Texto sacado de la obra "De orcum natura", de Norecic el idrio -escrito este mismo año, la tinta está fresca-)
Descripción
Norecic no hace una descripción detallada de los orcos. Aunque en una de sus cartas se refiere a ellos como seres de aspecto «mongoloide» o desagradable para los «estándares orunitas».
De sus escritos se extrae que los orcos son humanoides de apariencia terrible y bestial, de estatura variando entre la humana y un poco más baja, o incluso de tamaño ligeramente superior al de los hobbits. Su aspecto físico general es deforme y basto, poseyendo rostros brutales y feroces, piel de tonos fluctuantes entre verde oscuro y pardo, orejas puntiguadas y afilados colmillos en sus mandíbulas. Sus brazos son fuertes y anormalmente largos, y sus piernas, aunque arqueadas, les permiten correr a gran velocidad por cualquier tipo de terreno. Los orcos cuentan con una complexión física notablemente fuerte y robusta, aunque con una espalda jorobada que les hace andar encorvados; su musculatura es poderosa, y pueden desarrollar gran fuerza a la hora de luchar. Poseen cierta uniformidad de aspecto, aunque las deformidades son frecuentes en sus cuerpos en muy diferentes grados, y esto les concede características físicas individuales que en ocasiones pueden rayar en lo grotesco. Según se dice, no soportan la luz del sol, que les produce severos mareos. Su sangre es espesa y negra, y la esperanza de vida de los miembros de esta raza es casi totalmente desconocida.
Los orcos son universalmente descritos como criaturas atrapadas en un odio constante hacia todo lo vivo, empezando por sí mismos, y siendo esclavos del miedo profesado hacia sus crueles amos. La violencia es uno de sus impulsos naturales, y la ejercen en todo momento, produciendo ocasionales reyertas y enfrentamientos incluso entre sus propias filas; a pesar de ello, estos atributos les hacen soldados eficaces y sanguinarios, haciéndoles lanzarse a la batalla sin temor para disfrutar con la consecuente carnicería. La inteligencia varía entre ellos, pero incluso los menos dotados tienen nociones claras sobre su papel y cómo ejecutarlo.
No poseen una tecnología muy avanzada, aunque tienen rudimentos en la mayoría de las artes, y pueden desenvolverse bien en tareas de habilidad hasta cierto punto. Sus armas habituales son espadas curvas o cimitarras, utilizando también mazas, porras, martillos y otros tipos de armas de manejo simple y golpe sólido, en su mayoría de hueso, piedra o madera endurecida con fuego. Usan escudos redondos para cubrirse, y saben manejar arcos con cierta destreza. El entrenamiento entre ellos es mayormente innecesario, ya que la mayor parte de sus técnicas de combate se reducen a lo instintivo, y se ejercitan continuamente en ellas en sus numerosas guerras. Tras los últimos acontecimientos del noroeste, se ha notado una mejoría en sus conocimientos tecnológicos: parece ser que saben forjar metal y que añaden a su material bélico cotas de malla o de anillos, y armas de hierro.
Origen
Norecic postula que es erróneo pensar que los Orcos fueron la creación de Sefra, pues aún siendo de los más poderosos de los dioses, carece de capacidad para crear, como bien es conocido que ocurre con todos los dioses. Lo único que puede hacer Sefra es corromper lo ya creado o fabricar a partir de cosas ya creadas burlas de los seres que ya existen.
La versión del origen de los Orcos más difundida a través del desaparecido libro El decamenón (del que se tiene conocimiento por cierta tradición oral con la que el autor ha tomado contacto), es la que apunta a que los Elfos creen que los orcos se originaron por la corrupción que Sefra provocó en congéneres suyos, capturados en su temprana edad. Sin embargo, como se establece en este libro, es sólo una creencia élfica (que en último término serían los autores de estas historias).
Otras versiones de escritos posteriores del autor, algunos de los cuales aparecen en diversos volúmenes, apuntan a las posibles contradicciones del origen élfico. La más notoria es la que indica que, si los Elfos al morir en cuerpo van a Muntra, ¿qué sucede entonces con los Orcos? Si éstos fueran de origen élfico, y puesto que Sefra sólo puede corromper pero no cambiar los destinos de ninguna raza, entonces deberían ir a Muntra, y con la cantidad de Orcos que habría habido, las estancias de Muntra estarían llenas de estos seres, cosa que en ningún momento se indica.
Dentro del marco de su obra, hay diversas teorías que hablan sobre su origen:
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Orcos como corrupción hecha por Sefra a partir de los Elfos. Esta teoría entra en conflicto con diversos escritos posteriores, ya que se menciona en algunos que Sefra no tenía la capacidad para hacer que las corrupciones se hederasen y porque los orcos no tienen la inmortalidad. En el libro de El Decamenón se habla sobre "capitanes orcos", que eran inmortales; altos, grandes y fuertes (y que algunos, se parecían a elfos, pero con cicatrices en todo el rostro), e incluso que los primeros orcos fueron confundidos por elfos salvajes por otros elfos. Algunos estudiosos descartan esta teoría.
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Orcos como corrupción de Sefra a partir de Elfos mezclados con Hombres. Esta teoría es descartable debido a que, por lo menos en la primera batalla de los dioses, la Batalla bajo las Estrellas, aún no existían los Hombres, pues el Sol aún no se levantaba. Sin embargo, igualmente en uno de los textos escritos sobre Hyrandenia, se indica una antigua y muy desconocida leyenda de origen humano, que dice que el ser humano apareció mucho antes de lo indicado en las leyendas élficas; siendo en este periodo tratados de corromper por Sefra, lo cual tuvo como consecuencia que los Hombres hayan cometido un error, hecho que además según la versión humana sería la verdadera causa de la disminución del periodo de vida humana o de una posible pérdida de la inmortalidad. Así, esta leyenda humana, indicaría que los elfos conocieron al hombre mucho después de su aparición, y daría una validéz a la hipótesis del origen humano. Igualmente en una nota adjunta al libro un tal Christopher Neiklot cree que al parecer la conclusión final de era que los Orcos se crearon a partir de los Hombres.
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Orcos como corrupción total hecha por Sefra a partir de una raza distinta. En esta teoría, se presenta el problema de que, ya que no se conoce ninguna otra raza aparte a partir de la cual pudieran haber salido los Orcos, entonces la corrupción de esta raza debería haber sido total, cosa que Sefra tampoco puede realizar, pues estaría influyendo también en el destino de esta raza.
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Orcos como corrupción hecha por Sefra a partir de animales.
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Orcos como burlas de los Elfos hechas por Sefra a partir de la materia de la tierra (en semejanza a los Enanos transformados por Cutzu). Esta teoría es descartable debido al problema que Verixus le planteó a Cutzu con sus Enanos: éstos no tendrían libre albedrío mientras Cutzu no pensara en ellos, cosa que así debería suceder con los Orcos si Sefra no pensara en ellos, además de que tienen la capacidad de reproducirse y poseer cierta libertad (que ningún dios podría darles).
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Orcos como dioses menores caídos, similares a los Balrogs. Esta teoría es descartable debido a que no se dice en ninguna parte que hubiese distinción en la evolución de los dioses menores corruptos entre Balrog y orcos. También la cantidad de orcos existentes y su capacidad reproductora ponen en duda esto. Norecic declaró que ningún dios mayor tiene la capacidad de reproducirse (salvo en sus escritos primeros, que luego corrigió), siendo el caso de Ningal la única excepción conocida a esta regla.
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Orcos como corrupción con una mezcla de los diversos orígenes ya dichos. Esta hipótesis corregiría y explicaría las incongruencias sobre el origen de los orcos; indicando que los orcos tuvieron diferentes orígenes y posteriormente se cruzaron dando así origen a una raza pura de orcos mortales, y explicaría los escritos que cuentan en los primeros tiempos la existencia de ciertos orcos inmortales.
Aun así en el Quenta podemos rescatar la siguiente descripción:
"Pero de los desdichados que cayeron en la trampa de Sefra, poco se sabe con certidumbre. Porque ¿quién de entre los vivos ha descendido a los abismos de Utumno o ha explorado las tinieblas de los consejos de Sefra? Dicen los sabios de Eressëa que todos los Quendi que cayeron en manos de Sefra, antes de la caída de Utumno, fueron puestos en prisión, y por las lentas artes de la crueldad, corrompidos y esclavizados; y así crió Sefra la raza de los Orcos, por envidia y en mofa de los Elfos, de los que fueron después los más fieros enemigos. Porque los Orcos tenían vida y se multiplicaban de igual manera que los Hijos de Marya; y Sefra, desde que se rebelara en la Ainulindalë antes del Principio, nada podía hacer que tuviera vida propia ni apariencia de vida, así dicen los sabios. Y en lo profundo del oscuro corazón, los Orcos abominaban del Amo a quien servían con miedo, el hacedor que sólo les había dado desdicha. Quizá sea ésta la más vil de las acciones de Sefra, y la más detestada por Verixus."
Variantes
Norecic menciona varios tipos distintos de orcos:
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Orcos comunes: son los más frecuentes en toda Hyrandenia y forman las hordas del Este. Pueden variar enormemente en tamaños y deformaciones, pero en general son de piel negra, tienen grandes dientes y caminan encorvados. Les desagrada la luz solar. En estado salvaje son sucios e indisciplinados, al contrario que los orcos que forman parte de ejércitos regulares.
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Uruk-hai: son una versión de mayor tamaño de los orcos, y fueron creados en algún momento del presente siglo, y vistos por primera vez en 605 d.O. en la frontera este de Idria. Son una especie mejorada a partir de los orcos comunes. Caminan más erguidos, son algo más inteligentes y consideran al sol como a un enemigo más al que abatir, pero no como una molestia. Son más grandes y fieros que el resto de orcos, y también mejor equipados.
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Semiorcos: cruce entre orco y humano. No se especifica si este cruce se hizo de manera sexual o de alguna otra forma más sobrenatural, debido al desconocimiento sobre los métodos de reproducción de los orcos que se detallan un poco más abajo.
Se desconoce la forma en que se reproducen los orcos, pues nadie menciona la existencia de mujeres orco, así como tampoco de orcos infantes.
Existe, sin embargo, cierto indicio a favor del argumento de que la reproducción de los orcos tiene lugar de forma análoga a la del resto de las especies; la mención de que Bolgor, comandante de las tropas que combatió a la alianza improvisada de koraaneses, enanos e idrios en la Batalla de Helden, es hijo de Gazug, el caudillo de los Orcos de la Grieta abatido por Thargelion, de la casa Annûminas.
Cada orco, pues, tendría un padre y una madre. La presencia de esta última sería meramente asuntiva; al presentar a éstos únicamente se hace mención a la ascendencia paterna, y la presencia de las mujeres en las historias, si bien existe, queda perfectamente encajada en el terreno de lo anecdótico.
(Breve apunte que menciona tener origen en una reunión del Concilio Vaticano, en sesión extraordinaria del 11-11-610)
Los orcos viven de forma salvaje sobre todo en algunos lugares al este de Hyrandenia. Recientemente esto ha cambiado y también se hallan presentes en el oeste, al norte de Asha y al oeste de Nordria, motivo principal por el que se ha convocado la presente reunión del Concilio.
Además, se ha encargado a Norecic el idrio un recopilatorio en forma de libro sobre los orcos, que tan bien dice conocer, al estar los orcos en boca de muchos y, por así decirlo, de rabiosa actualidad.
Punto primero -de la localizazión de los orcos-:
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En el Cercano Este, en las estribaciones montañosas. No está claro si ya vivían allí antes del resurgimiento de Koraan. Posteriormente, la presencia de los orcos en dicho lugar no fue erradicada, y estuvieron en constante enfrentamiento con los idrios, los enanos y los koraaneses que habitaban la zona.
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En las minas de Gathol y Zirak. Los orcos las ocuparon cuando los enanos fueron aniquilados en el reciente conflicto. Durante meses se han convertido en una de sus madrigueras.
Punto segundo -de la migración de los orcos-:
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El debate sobre como irrumpe una fuerza de alrededor de 300.000 orcos desde el norte está abierto y nadie sabe a ciencia cierta qué ha ocurrido. Unos buscan motivos lógicos y apuntan a que simplemente entraron en pequeños grupos de cazadores por los hielos del norte persiguiendo grandes manadas de animales, y que al descubrir la ruta, la comunicaron a sus caciques y jefes tribales, que planearon una invasión relámpago brillante. Otros desdeñan esta teoría y consideran a los orcos incapaces de tamaña proeza, y hablan en términos más conspiradores de hechiceros no adscritos u otros poderes en la sombra que manejan a los orcos en base a sus macabros intereses (Norecic afirma que alguien ha jugado con fuego en cuanto al asunto de los orcos, pero preguntado sobre esta afirmación, no aporta pruebas ni datos adicionales). Sea como fuere, no hay pruebas que avalen ninguna de las teorías.
Punto tercero -medidas a tomar al respecto del peligro que representan los orcos a día de hoy-:
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Enviar un equipo de misioneros a Asha e Idria para tomar contacto directo con la situación y recabar información. Se encarga Moebius.
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La red de vigilancia destinará recursos con el fin de obtener información privilegiada sobre los orcos de las Driudns y sobre los planes de las potencias del entorno sobre el asunto. Se encarga Ariovisto.
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Plantear a las potencias del entorno la posibilidad de una coalición que enfrente el problema. Para ello se enviarán embajadas a Orun, Rhone, Asha, Media, Faras y Nordria. Se encarga Regulus.
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Se plantea una segunda sesión extraordinaria del Concilio cuando se tengan más datos. Se encarga el abajo firmante.
(Firma el documento Leontinus de Orisia, Secretario del Concilio).